El Desastre de los Campos Gladios

 

 

Después de la caída de Sauron, Isildur, el hijo y heredero de Elendil, vuelve a Gondor. Allí él asumió el Elendilmir [1] como Rey de Arnor, y proclamó su soberana señoría sobre todos los Dúnedain del Norte y el Sur; ya que él era un hombre de gran orgullo y vigor. Él permaneció durante un año en Gondor, restaurando su orden y definiendo sus límites; [2] pero la mayor parte del ejército de Arnor volvió a Eriador por el camino Númenóreano de los Vados de Isen a Fornost.

Cuando por fin él se sintió libre de volver a su propio reino él tenia prisa, y él deseó ir primero a Imladris; ya que él había dejado a su esposa y el hijo más joven allí, [3] y él tenía además una necesidad urgente del consejo de Elrond. Él por lo tanto determinó hacer su camino por el norte de Osgiliath, por encima de los Valles del Anduin a Cirith Forn en Andrath, el elevado paso alto del Norte, este conducía abajo a Imladris. [4]Él conocía bien la tierra, ya que él había viajado por allí a menudo antes de la Guerra de la Alianza, y había marchado por aquel camino a la guerra con los hombres de Arnor Oriental en la compañía de Elrond. [5]

Este era un largo viaje, pero el otro camino solo, iba al oeste y luego al norte encontrándose con el camino de Arnor, y luego al este a Imladris, era mucho más largo. [6]. Más rápido, tal vez, para los hombres montados, pero él no tenía ningún caballo apto para la montura; [7] seguro, tal vez, en días anteriores, pero Sauron había sido vencido, y la gente de los Valles habían sido sus aliados en la victoria. Él no tenía ningún miedo, salvo el del tiempo y la fatiga, pero estos hombres debían soportarlo como quien en la necesidad es enviado lejos fuera de la Tierra media. [8]

Entonces fue, tal cual dicho en las leyendas de días posteriores, que el segundo año de la Tercera Edad estaba llegando a su fin cuando Isildur plantado delante de Osgiliath en Ivanneth, [9] esperaba alcanzar Imladris en cuarenta días, por en medio de Narbeleth, hasta que el invierno casi apareciera en el Norte. En la puerta Este del Puente en una brillante mañana Meneldil [10] le dijo adiós. '¡Vaya ahora con buena marcha, y puede que el sol se acuerde de no dejar de brillar sobre su camino!'

Con Isildur iban sus tres hijos, Elendur, Aratan y Ciryon, [11] y su Guardia de doscientos caballeros y soldados, hombres duros de Arnor y curtidos por la guerra. De su viaje no se dice nada antes de que ellos hubieran pasado sobre el Dagorlad, y sobre el norte hacía las amplias tierras y vacías del sur del Gran Bosque frondoso. Sobre el vigésimo día, cuando ellos vinieron dentro de la vista lejana del bosque supremo las tierras altas ante ellos con un destello distante de los rojos y dorados de Ivanneth, el cielo se nublo y un viento oscuro vino del Mar de Rhún cargado de lluvia. La lluvia duró durante cuatro días; así cuando ellos llegaron a la entrada a los Valles, entre Lórien y Amon Lanc, [12], Isildur giro lejos del Anduin, aumentado con el agua rápida, y fueron sobre las cuestas escarpadas de su lado occidental para ganar los caminos antiguos de los Elfos Del bosque que corrían cerca del borde del Bosque.

Entonces esto vino a pasar que por la tarde del trigésimo día de su viaje ellos pasaban al norte de los limites de los Campos Gladios, [13] marchando a lo largo de un camino que conducía al reino de Thranduil, [14] como entonces era. El día claro iba disminuyendo; encima de las distantes montañas las nubes se juntaban, enrojecido por la bruma el sol como dibujado hacia abajo hacia ellos. Las profundidades del valle estaban ya en la sombra gris. Los Dúnedain cantaban, ya que la marcha estaba cerca de su día final, y tres partes del largo camino a Imladris estaban detrás de ellos. A su derecha el Bosque surgía sobre ellos en lo alto de las cuestas escarpadas que van hacía abajo a su camino, debajo del cual la pendiente hacía el fondo del valle era suave.         

De repente cuando el sol se sumergió en una nube, ellos oyeron los gritos horribles de los Orcos, y los vieron salir del Bosque y moviéndose bajo las pendientes, vociferando sus gritos de guerra. [15]. En la luz oscurecida su número sólo podía ser adivinado, pero los Dúnedain eran claramente muchos mas, aún diez veces, sobrepasaban en número. Isildur mando una thangail [16] ser preparado, una pared escudo de dos filas apretadas que podían ser dobladas atrás en uno u otro final si la flanqueaban, hasta en la necesidad convertirse en un anillo cerrado. Si la tierra hubiera sido plana o la pendiente en su favor él habría formado su compañía en una dírnaith [16] y haber cargado contra los Orcos, que esperaban por la gran fuerza de los Dúnedain y clavar sus armas por el camino y los dispersaría en la consternación; pero esto no podía ser hecho. Una sombra de presagio paso por su corazón.

‘La venganza de Sauron subsiste, aunque él pueda estar muerto', dijo él a Elendur, quien estaba de pie a su lado. '¡Hay astucia y desigenio aquí! No tenemos ninguna esperanza de ayuda: Moria y Lórien están ahora muy lejos, y Thranduil esta a cuatro días de marcha hacía adelante.’ 'Y llevamos cargas de valor más allá de todo cálculo,' dijo Elendur; ya que él tenía la confianza de su padre.

Los Orcos ahora se delineaban cerca. Isildur se giro hacía su escudero: 'Ohtar', [17] dijo él, 'Yo le doy esto ahora a su cuidado'; y él le entregó la gran funda y los fragmentos de Narsil, la espada de Elendil. 'Sálvelos de la captura por todos los medios que Usted pueda encontrar, y cueste lo que cueste; aún a costa de ser tomado por un cobarde el cual me abandonó. ¡Lleve a su compañero con Usted y escape! ¡Vaya! ¡Yo se lo mando!' Entonces Ohtar se arrodilló y besó su mano, y los dos jóvenes escaparon hacía abajo por el valle oscuro. [18]

Si la mirada penetrante de los Orcos marcaba su exaltación ellos no les prestaron atención. Ellos pararon brevemente, preparando su asalto. Primero ellos dejan volar un granizada de flechas, y luego de repente con un gran grito el cual ellos hicieron como Isildur hubiera hecho, y lanzado una gran masa de sus principales guerreros abajo la ultima oleada contra los Dúnedain, esperando romper su pared escudo. Pero esta se mantuvo firme. Las flechas habían sido inútiles contra la armadura Númenóreana. Los grandes Hombres sobresalían por encima de el más alto de los Orcos, y sus espadas y lanzas lejos excedían de las armas de sus enemigos. El ataque vaciló, se rompió y se retiraron, dejando a los defensores poco dañados, inalterados, detrás de los montones de caídos Orcos.

Pareció a Isildur que el enemigo se retiraba hacia el Bosque. Él miró hacia atrás. El borde rojo del sol destellaba entre las nubes como dirigiéndose abajo detrás de las montañas; la noche pronto caería. Él dio ordenes de continuar su marcha inmediatamente, pero desviando su curso hacia lo mas bajo y mas plana tierra donde los Orcos tendría menos ventaja. [19] Tal vez él creyó que después de su costoso rechazo ellos concederían el paso, aunque sus exploradores podrían seguirlo durante la noche y ver su campamento. Esta era la manera de los Orcos, quienes a menudo eran más desanimados cuando su presa podía dar la vuelta y atacar.

Pero él se confundía. No había sólo astucia en el ataque, sino odio feroz e implacable. Los Orcos de las Montañas fueron puestos rígidos y mandados por los criados siniestros de Barad-dûr, enviados mucho antes para vigilar el paso, [20] y aunque esto fuera desconocido para ellos, el anillo cortado de su mano negra dos años antes, todavía estaban cargados con la voluntad maligna de Sauron y pregonaba a todos sus criados para su contribución. Los Dúnedain estaban apenas a una milla cuando los Orcos se movieron otra vez. Esta vez ellos no estaban sobrecargados, pero usaron todas sus fuerzas. Ellos bajaron sobre un amplio frente, que se dobló en una media luna y pronto se cerró en un anillo cerrado sobre los Dúnedain. Ellos estaban ahora en silencio, y se mantuvieron a una distancia de el alcance de los arcos de acero temidos de Númenor, [21] pensaron que la luz pronto se iría, y Isildur tenía en conjunto demasiados pocos arqueros para su necesidad. [22] Él mandó hacer alto.

Hubo una pausa, conceptuaba la mirada más penetrante entre los Dúnedain que decía que los Orcos se movían hacia adentro, cautelosamente, paso a paso. Elendur fue a su padre, quien estaba de pie sombrío y solo, como si perdido en el pensamiento. 'Atarinya', dijo él, '¿qué el poder que intimida a estas sucias criaturas y les manda a ellos le obedece a Usted? ¿Es por consiguiente inútil?'

'¡Que lastima!, este no es, senya. Yo no puedo usarlo. Temo la aflicción de tocarlo. [23]. Y aún no he encontrado la fuerza para someterlo a mi voluntad. Este necesita una mayor que yo ahora sé que no tengo. Mi orgullo ha caído. Este debería ir a los Encargados de los Tres.'

En aquel momento allí provino un inesperado soplo de cuernos, y los Orcos se acercaban por todos los lados, arrojándose contra los Dúnedain con imprudente ferocidad. La noche había llegado, y la esperanza desvanecía. Los hombres estaban cayendo; ya que algunos Orcos grandes saltaban, dos a la vez, y muertos o vivos con su peso tiraban abajo un Dúnadan, para que otras garras fuertes pudieran arrastrarlo y matarlo. Los Orcos podían pagar cinco por uno en este cambio, pero esto era demasiado barato. Ciryon fue muerto de este modo y Aratan mortalmente herido en una tentativa de rescatarlo.

Elendur, no dañado aún, buscaba a Isildur. Él reunía a los hombres sobre el lado este donde el asalto era el más pesado, ya que los Orcos todavía temían el Elendilmir que él llevaba sobre su frente y lo rehuían. Elendur le tocó sobre el hombro y él dio la vuelta con ferocidad, pensando que un Orco se le había colocado detrás.

'Mi Rey', dijo Elendur, 'Ciryon esta muerto y Aratan esta moribundo. Su ultimo consejero debe aconsejarle, más bien mandarle, como Usted mandó a Ohtar. ¡Vaya! Tome su carga, y cueste lo que cueste llévela a ellos a los Encargados: ¡aún a costa de abandonar a sus hombres y a mí!'

'Hijo de Rey', dijo Isildur, 'yo se que debo hacerlo así; pero temo el sufrimiento. Tampoco yo podría ir sin su permiso. Perdóneme, y mi orgullo le ha llevado a este destino.' [24] Elendur lo beso. '¡Vaya! ¡Vaya ahora!' dijo Él.

Isildur giró hacía el oeste, y cogió el anillo que colgaba en un zurrón de una cadena fina sobre su cuello, él lo puso en su dedo con un grito de dolor, y nunca fue visto otra vez por ningún ojo en la Tierra media. Pero el Elendilmir del Oeste no podía ser apagado, y de repente este ardió en adelante rojo y colérico como una estrella ardiente. Los hombres y Orcos cedieron al paso del miedo; y Isildur, dibujando una capucha sobre su cabeza, desapareció en la noche. [25]

De lo que les aconteció a los Dúnedain sólo esto fue posteriormente sabido: antes de mucho todos ellos fueron muertos, salvo uno, un escudero joven atontado y enterrado bajo los hombres caídos. Así falleció Elendur, quien después debería haber sido el Rey, y como todo lo pronosticado quien lo conocía en su fuerza y sabiduría, y su majestad sin orgullo, uno de los más grandes, el más bueno de la semilla de Elendil el parecido a su gran señor. [26]

Ahora de Isildur se cuenta que él tenía gran pena y angustia de corazón, pero al principio él corrió como un venado de los sabuesos, hasta que él llego a la profundidad del valle. Allí él se paró, asegurándose de que él no ha sido seguido; ya que los Orcos podían rastrear a un fugitivo en la oscuridad por el olor, y no necesitan ningún ojo. Entonces él continuó con más cautela, por amplias planicies estiradas sobre la penumbra ante él, penosa e impracticable, con muchas trampas para sus pies errantes.

Entonces fue que él llego por fin a los bancos del Anduin en lo apagado de la noche, y él estaba cansado; ya que él había hecho un viaje que los Dúnedain sobre tal tierra no podían haber hecho ninguno tan rápido, marchando con pausa y por el día. [27] El río se arremolinaba oscuro y rápido ante él. Él permaneció por un rato, solo y en desesperación. Entonces con la prisa él se quitó todas sus armas y armadura, salvo una espada corta en su cinturón, [28] y se sumergió en el agua. Él era un hombre fuerte y resistente que pocos aún de los Dúnedain de aquella edad podían igualar, pero él tenía poca esperanza para ganar la otra orilla. Antes él estaba agotado lejos el fue obligado a girar casi al norte contra la corriente; y forcejeo como él podía él alguna vez haber sido barrido abajo hacia los enredos de los Campos Gladios. Ellos estaban cerca pensó él, [29] y aún como él sintió la corriente aflojar y casi había ganado a través él se encontró a si mismo luchando entre grandes torrentes e hierbajos pegajosos. Allí de repente él sabía que el anillo había desaparecido. Por casualidad, o convenientemente usado azar, este había abandonado su mano y había ido donde él nunca podría esperar encontrarlo otra vez. Al principio tan aplastante era su sentido de la pérdida que él no luchó más, y se habría hundido y ahogado. Pero rápidamente este animo había pasado. La pena le había dejado. Una gran carga le había sido llevada. Sus pies encontraron el lecho, y se levanto él mismo encima de el fango él trastabillaba por las cañas a un islote de pantanos cerca de la orilla occidental. Allí él se elevó encima del agua: sólo un hombre mortal, una pequeña criatura perdida y abandonado en las tierras salvajes de la Tierra media. Pero los Orcos de visión nocturna que estaban al acecho allí sobre la vigilia él asomo arriba, una sombra monstruosa de miedo, con un ojo penetrante como una estrella. Ellos soltaron sus flechas envenenadas sobre el, y escaparon. Innecesariamente, ya que Isildur desarmado fue perforado en el corazón y la garganta, y sin un grito él volvió dentro del agua. Ningún rastro de su cuerpo alguna vez fue encontrado por los Elfos o los Hombres. Así paso a ser la primera víctima de la maldad del anillo sin amo: Isildur, segundo Rey de todos los Dúnedain, señor de Arnor y Gondor, y en aquella edad de el ultimo Mundo.

 


Notas.

1: El Elendilmir es llamado en una nota a pie de página en el Apéndice A del Señor de los anillos; los Reyes de Arnor no llevaban ninguna corona, 'pero llevaban una sola gema blanca, el Elendilmir, la Estrella de Elendil, sujetada en sus frentes con una cinta de plata'. Esta nota da referencias a otras menciones de la Estrella de Elendil en el curso de la narrativa. No había de hecho una sino dos gemas de este nombre.

2: Tal cual relacionado en el Cuento de Cirion y Eorl, utilizando historias más viejas ahora sobre todo perdidas, para su cuenta de los acontecimientos que condujeron al Juramento de Eorl y la alianza de Gondor y los Rohirrim. [nota del Autor]

3: El hijo más joven de Isildur era Valandil, el tercer Rey de Arnor: ver de los anillos de Poder en el Silmarillion. En el Apéndice A en el Señor de los anillos esto es declarado que él nació en Imladris.

4: Este paso es llamado sólo aquí por un nombre Élfico. En Rivendell mucho después de Gimli el Enano se referían a él como el Paso Alto: 'Si no fuera por los Beornings, el paso de Dale a Rivendell hace mucho que sería imposible. Ellos son hombres valientes y mantienen abierto el Paso Alto y el Vado de Carrock.' (La Compañía del anillo II 1.) Estaban en este paso que Thorin Escudo de Roble y su compañía fueron capturados por los Orcos (el Capítulo 4 de el Hobbit). Andrath sin duda quiere decir 'mucha subida'.

5: Cf. De los anillos de Poder en el Silmarillion: ' [Isildur] marchaba al norte desde Gondor por el camino que Elendil había venido.'

6: Trescientas leguas y más [es decir, por la ruta que Isildur proyectaba tomar], y la mayor parte caminos sin confeccionar; en aquel tiempo el único camino Númenóreano era el gran camino que unía Gondor y Arnor, por Calenardhon, entonces al norte sobre el Gwathló en Tharbad, y así por fin hasta Fornost; y el Camino Este-Oeste de los Puertos Grises a Imladris. Estos caminos se cruzaban en un punto [Bree] al oeste de Amon Sûl (la cima del tiempo), un camino Númenóreano de unas dimensiones de trescientas noventa dos leguas desde Osgiliath, y luego al este a Imladris ciento dieciséis; quinientas ocho leguas en total. [nota del Autor.] - Ver el Apéndice sobre Medidas Lineales Númenóreanas.

7: Los Númenóreanos en su tierra poseían caballos, a los cuales ellos estimaban [ver la 'Descripción de Númenor'.] Pero ellos no los usaban en la guerra; puesto que todas sus guerras eran de ultramar. También ellos eran de gran estatura y fuerza, y sus soldados totalmente equipados estaban acostumbrados a llevar armaduras y armas pesadas. En sus establecimientos sobre la orilla de la Tierra media ellos adquirieron y criaron caballos, pero los usaron poco para la montura, excepto en el deporte y el deleite. En la guerra ellos fueron usados sólo por los mensajeros, y por las tropas armadas de arcos ligeros (a menudo no de raza Númenóreana). En la Guerra de la Alianza tales caballos que ellos usaron habían sufrido grandes pérdidas, y pocos estuvieron disponibles en Osgiliath. [nota del Autor.]

8: Ellos necesitaban algún equipaje y provisiones para una región sin casas; ya que ellos no esperaban encontrar ninguna vivienda de Elfos o Hombres, antes de que ellos alcanzaran el reino de Thranduil, casi al final de su viaje. En marzo cada hombre llevaba con él las provisiones de dos días (otra 'cartera para la necesidad' es mencionada en el texto; el resto, y otro equipaje, era llevado por pequeños caballos robustos, de una clase, esto fue dicho, que primero había sido encontrado, salvaje y libre, en los amplios llanos al sur y al este del Bosque frondoso. Ellos habían sido domesticados; pero aunque ellos llevaban cargas pesadas (al paso de marcha), ellos no permitían a ningún hombre montarlos. De estos ellos sólo tenían diez. [nota del Autor].

9: Yavannië 5, según el Cálculo de los Rey Númenóreano, todavía mantenido con pequeños cambios en el Calendario de la Comarca. Yavannië (Ivanneth) así correspondía a Halimath, nuestro septiembre; y Narbeleth a nuestro octubre. Cuarenta días (antes de Narbeleth 15) fue suficiente, si todo estuviera bien. El viaje era probablemente al menos trescientas ocho leguas de marcha; pero los soldados de los Dúnedain, los altos hombres de gran fuerza y resistencia, estaban acostumbrados a moverse totalmente armados haciendo ocho leguas al día 'con facilidad': cuando ellos llevaban ocho relevos de una legua, con interrupciones cortas al final de cada legua (lár, Sindarin daur, originalmente significaba una parada o pausa), y una hora cerca del mediodía. Esto hacía una 'marcha’ de aproximadamente diez horas y media, en las que ellos andaban ocho horas. Este paso ellos podían mantenerlo durante largos períodos con la provisión adecuada. Con prisa ellos podían moverse mucho más rápido, unas doce leguas al día (o en gran necesidad más), pero durante períodos cortos. En la fecha del desastre, en la latitud de Imladris (a la cual ellos se estaban acercando), había al menos once horas de luz del día en campo abierto; pero en pleno invierno menos de ocho. Largos viajes no eran, sin embargo, emprendidos en el Norte entre el principio de Hithui (Hísimë, noviembre) y el final de Nínui (Nénimë, febrero) en tiempo de paz. [nota del Autor.] - Una cuenta detallada de los Calendarios en uso en la Tierra media es dado en el Apéndice D del Señor de los anillos.

10: Meneldil era el sobrino de Isildur, hijo del hermano menor de Isildur Anárion, muerto en el asedio de Barad-dûr. Isildur había establecido a Meneldil como Rey de Gondor. Él era un hombre de cortesía, pero con visión de futuro, y él no reveló sus pensamientos. El estaba de hecho bien-complacido por la partida de Isildur y sus hijos, y esperado que los asuntos en el Norte los mantendrían mucho tiempo ocupados. [nota del Autor]. - Esto es declarado en los anales inéditos acerca de los Herederos de Elendil que Meneldil era el cuarto hijo de Anárion, que este nació en el año 3318 de la Segunda Edad, y que él fue el ultimo hombre en nacer en Númenor. La nota citada es la única referencia a su carácter.

11: Los tres lucharon en la Guerra de la Alianza, pero Aratan y Ciryon no habían estado en la invasión de Mordor y el sitio de Barad-dûr, ya que Isildur les había enviado a dotar de personal su fortaleza de Minas Ithil, no sea que Sauron escapara de Gil-galad y Elendil y buscar forzosamente un camino a través de Cirith Dúath (más tarde llamado Cirith Ungol) y tomar venganza sobre los Dúnedain antes de que él fuera vencido. Elendur, el heredero de Isildur y querido por él, había acompañado a su padre a todas partes de la guerra (salvo el ultimo desafío sobre Orodruin) y él tenía la confianza total de Isildur. [nota del Autor.] - Esto es declarado en los anales mencionados en la ultima nota que el hijo mayor de Isildur nació en Númenor el año 3299 de la Segunda Edad (Isildur él mismo nació en el 3209).

12: Amon Lanc, 'la Colina Desnuda', era el punto más alto de la región montañosa en la esquina del sudoeste del Bosque frondoso, y fue así llamado porque ningún árbol crecía sobre su cumbre. En días posteriores fue Dól Guldur, la primera fortaleza de Sauron después de su despertar. [nota del Autor.]

13: Los Campos Gladios (Loeg Ningloron). En los Días Mayores, cuando los Elfos Del bosque primero se establecieron allí, allí había un lago formado en una depresión profunda en el cual el Anduin vertía desde el Norte abajo a la parte más rápida de su curso, una larga pendiente de aproximadamente setenta millas, y allí se mezclaba con el torrente del Río Gladio (Sîr Ninglor) apresurándose desde las Montañas. El lago había sido más amplio al oeste del Anduin, por el lado occidental del valle era escarpado; pero sobre el este probablemente alcanzaba lejos hasta los pies de las largas pendientes hacia abajo del Bosque (entonces todavía boscoso), sus limites con cañas siendo marcado por la cuesta suave, solamente debajo del camino que Isildur iba siguiendo. El lago se había convertido en un gran pantano, por el que el río correteaba en un páramo de islotes, y las amplias camas de caña y torrentes, y ejércitos o lirio amarillo que crecía más alto que un hombre y daba su nombre a toda la región y al río de las Montañas sobre cuyo curso inferior ellos crecían más densamente. Pero el pantano había retrocedido al este y de los pies de las cuestas inferiores había ahora amplias llanuras, cubiertas con hierba y pequeños torrentes, sobre las cuales los hombres podían andar. [nota del Autor.]

14: Mucho antes de la Guerra de la Alianza, Oropher, el Rey de los Elfos Del bosque al este del Anduin, siendo molestado por los rumores del poder creciente de Sauron, había abandonado sus antiguas viviendas sobre Amon Lanc, cruzando el río de su familia en Lórien. Tres veces él se había movido hacia el norte, y en el final de la Segunda Edad él moraba en las cañadas occidentales del Emyn Duir, y su numerosa gente vivía y vagaba en los bosques y valles hacia el oeste hasta el Anduin, al norte del Camino enano antiguo (Men-i-Naugrim). Él se había unido a la Alianza, pero fue muerto en el asalto sobre las Puertas de Mordor. Thranduil su hijo habían vuelto con el remanente del ejército de los Elfos Del bosque el año antes de la marcha de Isildur.

El Emyn Duir (Montañas Oscuras) era un grupo de colinas altas en el nordeste del Bosque, así llamado porque los densos bosques de abetos crecían sobre sus pendientes; pero ellos no tenían todavía un nombre maligno. En días posteriores cuando la sombra de Sauron se extendió hasta el Gran Bosque frondoso, y lo cambio de Eryn Galen a Taur-nu-Fuin (traducido Mirkwood), el Emyn Duir se convirtió en el lugar predilecto de muchas de sus mayores criaturas malignas, y fue llamado Emyn-nu-Fuin, las Montañas del Mirkwood. [nota del Autor.] - Sobre Oropher ver el Apéndice B la 'Historia de Galadriel y Celeborn'; en uno de los pasajes allí citaron la marcha atrás de Oropher hacia el norte dentro del Bosque frondoso es atribuido a su deseo de moverse fuera del alcance de los Enanos de Khazad-dûm y de Celeborn y Galadriel en Lórien.

El nombre Élfico de las Montañas del Mirkwood no es encontrado en otro sitio. En el Apéndice F (II) del Señor de los anillos el nombre Élfico de Mirkwood es Taur-e-Ndaedelos 'el bosque del gran miedo'; el nombre dado aquí, Taur-nu-Fuin 'el bosque bajo la noche ', era el nombre posterior de Dorthonion, la región montañosa arbolada sobre las fronteras del norte de Beleriand en los Días Mayores. El uso del mismo nombre, Taur-nu-Fuin, a ambos Mirkwood y Dorthonion es notable, en la luz de los dibujos de mi padre de ellos: ver los Dibujos de J.R.R.Tolkien, 1979, nota 37. -Después del final de la Guerra del anillo Thranduil y Celeborn renombraron Mirkwood una vez más, llamándolo Eryn Lasgalen, los Bosques de las hojas verdes ( Apéndice B del Señor de los anillos). Men-i-Naugrim, el Camino enano, es el Camino Viejo del Bosquel descrito en el Hobbit, Capítulo 7. En el esbozo más temprano de esta sección de la narrativa presente hay una nota refiriéndose a 'el Camino antiguo del Bosque que conducía abajo desde el Paso de Imladris y cruzaba el Anduin por un puente que había sido ampliado y reforzado para el paso de los ejércitos de la Alianza), y así sobre el valle Easter hasta el Bosque frondoso. El Anduin no podía ser acortado en ningún punto inferior; por unas millas debajo del Camino Forestal la tierra descendía abruptamente y el río se hacia mas rápido, antes de que este alcanzara el gran estanque de los Campos Gladios. Más allá de los Campos este se aceleraba otra vez, y era entonces una gran inundación alimentada por muchas corrientes. De la cual los nombres estan olvidados salvo los de los más grandes: el Gladio (Sîr Ninglor), Silverlode (Celebrant), y Limlight (Limlaith). 'En el Hobbit el Camino Forestal atravesaba el gran río por el Vado Viejo, y no hay ninguna mención de allí haber una vez habido un puente para cruzar.

15: Una tradición diferente del acontecimiento es representado en el breve cuento dado en De los Anillos de Poder (el Silmarillion): 'Isildur fue aplastado por una hueste de Orcos que estaba al acecho en las Montañas Nubladas; y ellos descendieron sobre él inadvertidamente en su campamento entre el Bosque frondoso y el Gran Río, próximo a Loeg Ningloron, los Campos Gladios ya que él estaba distraído y no puso ningún guardia, considerando que todos sus enemigos habían sido derrotados.'

16: Thangail 'la pared escudo' era el nombre de esta formación en Sindarin, la lengua normalmente hablada entre la gente de Elendil; su nombre 'oficial' en Quenya era sandastan 'la barrera escudo', derivado del primitivo thandã 'escudo' y stama-'barrera, para impedir la entrada'. La palabra Sindarin usaba un segundo elemento diferente: cail, una valla o palizada de puntos y estacas afiladas. Esta, en la forma primitiva kegle, derivaba de una raíz keg- 'nudo, púa', visto también en la palabra primitiva kegyã 'valla', de ahí el Sindarin cai (cf. Morgai en Mordor).

La dírnaith, Quenya nernehta ' hombre en punta de lanza', era una formación en cuña, lanzada sobre una corta distancia contra una congregación de enemigos, pero no a una formación en orden, o contra una formación defensiva sobre la tierra abierta. Quenya nehte, Sindarin naith fue aplicada a cualquier formación o proyección afilada en un punto: una punta de lanza, cuña triangular, el promontorio estrecho (raíz nek, estrecho); cf. la Naith de Lórien, la tierra en el ángulo del Celebrant y el Anduin, cuyo empalme actual de los ríos era más estrecho y más puntiagudo que puede ser mostrado en un mapa a pequeña escala. [nota del Autor.]

17: Ohtar es el único nombre usado en las leyendas; pero esto es probablemente sólo el título del discurso que Isildur uso en este momento trágico, ocultando su sentimiento bajo la formalidad. Ohtar 'guerrero, soldado' era el título de todos los que, aunque totalmente entrenados y experimentados, aún no habían sido admitidos a el rango o roquem, de 'caballero'. Pero Ohtar era estimado por Isildur y de su propia familia. [nota del Autor.]

18: En la corriente más antigua Isildur ordenó a Ohtar que tomara a dos compañeros con él. En De los anillos de Poder (el Silmarillion) y en la Compañía del anillo II 2 cuenta que 'tres hombres sólo llegaron alguna vez atrás sobre las montañas’. En el texto dado aquí la implicación es que el tercero era Estelmo, el escudero de Elendur, quien sobrevivió a la batalla.

19: Ellos habían pasado la depresión profunda de los Campos Gladios, mas allá de los cuales la tierra sobre el lado este del Anduin (el cual fluía por un cauce profundo) era firme y seco, para la situación de la tierra había cambiado. Esto comenzaba a subir hacia el norte hasta muy cerca del Camino Forestal y el país de Thranduil esto era casi llano con los alero del Bosque frondoso. Esto Isildur lo sabía bien. [nota del Autor.]

20: Podía ser sin duda que Sauron, bien informado de la Alianza, habían enviado tales tropas Orco del Ojo Rojo como él podía escatimar, para que ellos pudieran acosar algunas fuerzas que intentaran acortar su camino cruzando las Montañas. En el caso el principal poder de Gil-galad, juntos con Isildur y parte de los Hombres de Arnor, habían venido sobre los Pasos de Imladris y Caradhras, y los Orcos estaban consternados y se ocultaban. Pero ellos permanecieron despiertos y vigilantes, determinaron de atacar alguna compañía de Elfos o Hombres a los que ellos sobrepasaran en número. Thranduil ellos habían dejado el paso, puesto que aún su disminuido ejército era en gran parte demasiado fuerte para ellos; pero ellos esperaron su momento, principalmente ocultos en el Bosque, mientras otros acechaban a lo largo de las orillas. Es improbable que alguna noticia de la caída de Sauron les hubiera llegado, ya que él había sido rigurosamente sitiado en Mordor y todas sus fuerzas habían sido destruidas. Si algunos pocos se hubieran escapado, ellos habrían escapado lejos al Este con los espectros del anillo. Este pequeño destacamento en el Norte, de ningún relato, fue olvidado. Probablemente ellos postularon que Sauron había sido victorioso, y el ejército de guerra de Thranduil lleno de cicatrices se retiraba para ocultarse en la seguridad del Bosque. Así ellos estarían envalentonados e impacientes para ganar la alabanza de su amo, aunque ellos no hubieran estado en las batallas principales. Pero esta no fue su alabanza la que ellos habrían ganado, si alguno hubiera vivido mucho suficiente para ver su renacimiento. Ningún martirio habría satisfecho su cólera con los locos chapuceros quienes habían dejado escapar el botín más grande en la Tierra media; si bien ellos no podían saber nada del anillo Único, quien salvo a Sauron mismo fue conocido sólo por los Nueve espectros de los anillos, sus esclavos. Aún muchos han pensado que la ferocidad y la determinación sobre su asalto sobre Isildur fue en parte debido al anillo. Esto fue poco más de dos años desde que este había abandonado su mano, y aunque este pronto se enfriara este era todavía pesado con su voluntad maligna, y buscando todos los medios para volver a su señor (como este hizo otra vez cuando él se recuperó y se había realojado). Así, esto es pensado, aunque ellos no lo entendieran los jefes Orco estaban llenos de un deseo feroz de destruir a los Dúnedain y capturar a su líder. Sin embargo demostrado en el caso este de la Guerra del anillo fue perdido en el Desastre de los Campos Gladios. [nota del Autor.]

21: Sobre los arcos de los Númenóreanos ver la 'Descripción de Númenor'.

22: No más que veinte, esto es dicho; puesto que tal necesidad no la habían esperado. [nota del Autor.]

23: Comparar las palabras de la voluntad que Isildur escribió acerca del anillo antes de que él se marchara de Gondor sobre su ultimo viaje, y las que Gandalf relato al Consejo de Elrond en Rivendell: 'Estaba caliente cuando primero lo tomé, caliente como una piedra, y mi mano fue quemada, así que yo dude si alguna vez estaría libre de el dolor de ello. Aún todavía cuando yo escribo el esta templado y parece encogerse...' (La Compañía del anillo II 2).

24: El orgullo que le condujo a guardar el anillo contra el consejo de Elrond y Círdan que este debería ser destruido en las llamas de Orodruin (la Compañía del anillo II 2, y de los anillos de Poder, en el Silmarillion).

25: El significado, suficientemente notable, de este pasaje parece ser que la luz del Elendilmir era la prueba contra la invisibilidad conferida por el anillo Único cuando era usado, si su luz era visible el anillo no estaba siendo usado; pero cuando Isildur cubrió su cabeza con una capucha su luz se extinguió.

26: Se dice que en días posteriores aquellos (tal como Elrond) cuyas memorias lo recordaron era parecido por la gran semejanza a él, en el cuerpo y la mente, del Rey Elessar, el vencedor en la Guerra del anillo, en la cual ambos el anillo y Sauron fueron terminados para siempre. Elessar era según los registros de los Dúnedain el descendiente en el grado trigésimo-octavo de Valandil el hermano de Elendur. Así mucho fue lo que paso para que él fuera vengado. [nota del Autor.]

27: Siete leguas o más del lugar de la batalla. La noche había caído cuando él escapó; él alcanzó el Anduin en la medianoche o cerca de ella. [nota del Autor.]

28: Esta era de un tipo llamado eket: una espada corta punzante con una amplia lámina, puntiaguda y de doble filo, de unas doce pulgadas y medio pie de largo. [nota del Autor.]

29: El lugar de la ultima posición había sido una milla o más allá de su frontera del norte, pero tal vez en la oscuridad la caída de la tierra había doblado su curso algo al sur. [nota del Autor.]

 

Proporcionado por Enrique