El más hermoso de los reinos élficos que quedaban en la Tierra Media en la Tercera Edad del Sol se encontraba en el Bosque Dorado, al este de las Montañas Nubladas y más allá de las Puertas de Moria. Se lo llamaba Lothlórien, «la tierra en la que sueñan las flores», y recibía también los nombres de Lórien, «tierra de los sueños», y Laurelindórinan, «tierra del valle del oro cantor». En este reino de los bosques, crecían los árboles mallorn de hojas doradas y troncos plateados. Eran los árboles más altos y más hermosos de la Tierra Media y sobre sus ramas altas, los elfos de Lothlórien, que se llamaban galadhrim, o «pueblo de los árboles», construían sus casas sobre unas plataformas llamadas telain o flets.

Los galadhrim eran prácticamente invisibles, porque se movían por las ramas altas y llevaban capas de elfos grises con una capacidad camaleónica mágica. Aquí gobernaban la reina noldo Galadriel y el rey sinda Celeborn, y podían contemplarse atisbos de la gloria de los reinos élficos de antaño. Lothlórien poseía una gran ciudad-palacio llamada Caras Galadon, la «ciudad de los árboles». Era un palacio real construido en la cima de una gran colina en la que se encontraban los árboles más altos del bosque y estaba rodeada por un muro al que rodeaban a su vez otros grandes árboles. Lothlórien, que seguía el modelo del reino de los elfos grises de Doriath en la desaparecida Beleriand, estaba protegido por un sortilegio poderoso, igual que el antiguo reino de la Primera Edad.

Galadriel era la eldar de más alto rango que permanecía en la Tierra Media y con el poder de Nenya, su Anillo de Adamante y Agua, mantenía un sortilegio de protección en torno a Lothlórien que impedía la entrada de enemigos y lo volvía invisible al Ojo de Sauron. Durante casi toda la Tercera Edad, Lothlórien se mantuvo apartado de las luchas de los restantes pueblos de la Tierra Media, pero, durante los últimos años de la edad, la Comunidad del Anillo entró en el reino. Huyendo de los siervos de Sauron, y tras la caída de Gandalf, encontraron descanso y refugio, y Galadriel les entregó mágicos presentes que renovaron sus fuerzas y su voluntad.

Durante la Guerra del Anillo, Lothlórien fue atacado tres veces por los siervos de Sauron, procedentes de Dol Guldur en el Bosque Negro. Estas fuerzas fueron rechazadas y, tras la caída de Mordor, los elfos de Lothlórien destruyeron Dol Guldur y dieron al Bosque Negro el nuevo nombre de Bosque de las Hojas Verdes. Cuando, a principios de la Cuarta Edad, Galadriel abandonó la Tierra Media rumbo a las Tierras Imperecederas y Celeborn se llevó a la mayoría de los galadhrim al Bosque de las Hojas Verdes y fundó Lórien Oriental, el Bosque Dorado de Lothlórien fue abandonado poco a poco y su mágica luz se desvaneció.